Como funciona el Eco-Baño
Inicialmente, el sistema separa líquidos de sólidos cuando ingresan a la cámara a través de la taza del inodoro especialmente diseñada. El líquido desagua al fondo de la cámara, mientras que el sólido queda retenido en la placa de secado.
Tanto el líquido como el solido están expuestos a un continuo flujo de aire, el cual es forzado a través de la unidad por un sistema de ventilación forzada, accionado con un poco de viento. El movimiento del aire es reforzado por un dispositivo de extracción de aire posicionado en la chimenea de ventilación, y es reemplazado por aire que entra por las tuberías de ventilación de entrada y la taza cerámica.
El aire, al pasar por el sistema, deshidrata los residuos sólidos, los cuales descienden por la placa de secado inclinada y perforada. Esto causa que el líquido que se haya acumulado en el fondo de la cámara, se evapore.
Al mismo tiempo, la luz solar absorbida por la tapa de inspección negra eleva la temperatura dentro de la cámara. El calor intenso, un período de retención prolongado y aire rico en oxígeno que circula por el sistema, deshidratan y descomponen los residuos.
Al final del proceso los resíduos se convierten, a través de una actividad bacteriológica y biológica estimulada, en un material inofensivo y estabilizado. En este punto está reducido a aproximadamente un 5% de su volumen original.
La presión negativa dentro de la cámara previene el escape de cualquier olor a través de la taza o por los tubos de ingreso de ventilación. Cualquier olor se ventila hacia la atmósfera a través de la chimenea de extracción accionada por el viento.